La reciente celebración del IV Encuentro Ibérico Joven Madrid-Lisboa ha dejado una huella imborrable en los corazones de los atletas participantes. Del 31 de mayo al 2 de junio, Lisboa acogió con entusiasmo a los jóvenes deportistas de Madrid en una competición que trascendió lo meramente atlético para resaltar la camaradería, la experiencia compartida y el espíritu deportivo.
Organizado por la Federación de Atletismo de Madrid, el encuentro no solo fue una oportunidad para demostrar habilidades atléticas, sino también un espacio para fortalecer lazos entre los jóvenes deportistas de ambas regiones. La calidez y hospitalidad de la Asociación de Atletismo de Lisboa, encabezada por el director técnico Mario, fueron fundamentales para el éxito del evento. Su dedicación, generosidad y amabilidad garantizaron una experiencia inolvidable para todos los participantes.
El alojamiento en Estoril, frente a las tranquilas aguas del Atlántico, añadió un toque especial a la convivencia entre los atletas. La proximidad a la playa no solo ofreció momentos de relax y diversión, sino también la oportunidad de disfrutar del entorno natural que rodeaba la competición.
El compromiso deportivo estuvo presente en cada carrera, salto y lanzamiento, pero fue el respeto mutuo y el compañerismo lo que verdaderamente destacó durante todo el encuentro. Desde los líderes de equipo, como Isidro Rodríguez Martín y José Luis Barrios Menéndez, hasta los entrenadores Miguel Ángel Martínez Langa y Javier V. Martín, cada figura contribuyó al ambiente de camaradería y trabajo en equipo que caracterizó al evento.
La selección de atletas de Madrid, tanto en las categorías Sub 18 como Sub 16, demostró un alto nivel de rendimiento y dedicación, pero más allá de los resultados, lo que perdurará en la memoria de todos los presentes es el compañerismo, la solidaridad y el respeto que reinó a lo largo de la competición.
El IV Encuentro Ibérico Joven Madrid-Lisboa no solo fue un evento deportivo, sino una experiencia enriquecedora que fortaleció los lazos entre las comunidades atléticas de ambas regiones. Agradecemos profundamente a la Asociación de Atletismo de Lisboa, especialmente a su director técnico Mario, por su inestimable colaboración y apoyo en la organización de este inolvidable encuentro deportivo.